SMA Solar ha sido galardonada en la Intersolar Europe 2014 (Múnich) con el premio “Intersolar AWARD” en la categoría de energía fotovoltaica por el SMA Fuel Save Controller. El SMA Fuel Save Controller, como parte de la SMA Fuel Save Solution, permite por primera vez incorporar un alto porcentaje de energía fotovoltaica a los sistemas eléctricos diésel. Incluso bajo condiciones ambientales extremas el SMA Fuel Save Controller garantiza que las redes híbridas de energía fotovoltaica y diésel funcionen de manera estable. Además reduce tanto los costes de funcionamiento como los de mantenimiento. SMA recibe por cuarta vez el premio “Intersolar AWARD”.
“En regiones remotas con una conexión inestable a la red, la competitividad de muchas empresas industriales depende en gran medida que el suministro de corriente sea fiable y económico. Por primera vez, la SMA Fuel Save Solution permite aprovechar una gran parte de energía fotovoltaica, hasta un 60% de la potencia suministrada por los generadores diésel, a la vez que garantiza la estabilidad de la red”, explica Volker Wachenfeld, Senior Vice President Hybrid & Storage de SMA.
Las regiones expuestas a mayor radiación solar, como el Oriente Próximo, África subsahariana y el Sudeste Asiático, generan más de un tercio en las ventas anuales de turbinas de gas y diésel. Estas regiones representan un mercado muy prometedor para los sistemas híbridos de generación de electricidad.
El desafío: garantizar la estabilidad de la red
A nivel internacional y hasta el día de hoy, los generadores diésel han sido el estándar gracias a los bajos costes de inversión abasteciendo con electricidad regiones aisladas y respaldando las redes inestables. Debido al considerable aumento en el precio de los combustibles durante los últimos años, los costes para generar electricidad con diésel también han aumentado. Al mismo tiempo han bajado los precios de los sistemas fotovoltaicos, lo que conlleva grandes ahorros al aprovechar una mayor cantidad de energía fotovoltaica.
“Con un promedio de tres a cinco años, los tiempos de amortización de inversiones en sistemas híbridos de energía fotovoltaica y diésel son muy cortos. Además, la ampliación posterior de los sistemas es posible en todo momento y sin complicaciones”, añade Volker Wachenfeld. Los costes de funcionamiento y mantenimiento para los sistemas híbridos de gran tamaño se pueden reducir considerablemente ahorrando hasta 450 000 litros de diésel al año en plantas fotovoltaicas de un megavatio.
El mayor desafío tecnológico consiste en incorporar de manera estable el máximo posible de energía fotovoltaica a las redes diésel utilizando una tecnología inteligente para la regulación. La SMA Fuel Save Solution ha sido especialmente diseñada para este tipo de sistemas. El SMA Fuel Save Controller representa, junto con los inversores fotovoltaicos, el componente principal que regula la inyección de energía fotovoltaica y constituye el punto de unión entre el generador diésel, la planta fotovoltaica y el equipo consumidor. El SMA Fuel Save Controller registra los flujos de energía en la red aislada y calcula la potencia máxima permitida. El SMA Fuel Save Controller garantiza la estabilidad permanente del sistema gracias a un control perfecto de los grupos electrógenos.
