El consumo de productos petrolíferos se situó en 5,1 millones de toneladas en julio, lo que supone un descenso del 8% con respecto al mismo mes del ejercicio pasado y del 19% con respecto a julio de 2008, cuando la crisis financiera estaba a punto de agravarse con la quiebra de Lehman Brothers.
El descenso de julio se produce después de que el consumo de gasóleo, que asciende a 2,3 millones de toneladas y que equivale a casi la mitad del total, cayese un 8%, mientras que el de fuelóleo se situó en 883.000 toneladas, tras descender un 13%, según el último boletín mensual de la Corporación de Rservas de Productos Petrolíferos (Cores).
En los siete primeros meses del año, la demanda de productos petrolíferos acumula un descenso del 6,5%, hasta 35,5 millones de toneladas, y cae especialmente en el segmento del fuelóleo, un 8%, hasta 5,7 millones de toneladas.
El gasóleo consumido hasta julio ronda las 17,2 millones de toneladas, un 5,8% menos, mientras que las gasolinas alcanzan 2,8 millones de toneladas, un 5,9% menos. Los querosenos registran descensos del 5,7%, hasta 3 millones de toneladas.
Cores constata que todos los productos registran descensos de demanda en julio y atribuye la caída tanto a la menor actividad económica como a la contracción de la demanda privada.
En el caso de los combustibles de automoción, la demanda acumula un descenso del 5,6% hasta julio, cuando ya se había iniciado la temporada vacacional, en la que se registraron máximos históricos en los precios de la gasolina y del gasóleo.
EP