El plan europeo contra el cambio climático continúa su andadura

Creado: Mar, 03/11/2008 - 09:48
Autor: energelia

El Consejo Europeo celebra la Cumbre de Primavera los próximos 13 y 14 marzo en Bruselas, donde, según informa la agencia EFE, respaldará la ambiciosa estrategia contra el cambio climático y con importantes objetivos en el área de las energías renovables propuesta por la Comisión.

 

{xtypo_dropcap}E{/xtypo_dropcap}l plan propuesto para luchar contra el cambio climático y fomentar las renovables fue presentado el pasado mes de enero por la Comisión Europea y pretende reafirmar el liderazgo de la UE en la lucha contra el calentamiento global, de cara a las negociaciones de un futuro acuerdo internacional posKioto. El coste de las medidas ascenderá a 66.000 millones de euros hasta 2020, pero Bruselas asegura que la inacción saldría a la UE mucho más cara.

 

Los líderes de la UE dejarán claro el próximo viernes en la Cumbre de Primavera que consideran las propuestas de la Comisión Europea “una buena base”, según fuentes diplomáticas consultadas por la agencia EFE, pero no debatirán sobre el esfuerzo que tendrá que realizar cada país, algo que será objeto de largas y complejas negociaciones a lo largo del año. No obstante, se comprometerán a llegar a un acuerdo sobre el reparto de esas cargas antes de finalizar 2008, a fin de acudir con una posición común fuerte a la conferencia de la ONU de Copenhague de 2009, donde se intentará concluir un pacto global contra el cambio climático.

 

En el área de las energías renovables, la Cumbre de Primavera respaldará los planes para aumentar el consumo de ese tipo de energía y de los biocarburantes. España, según el plan de la UE, deberá conseguir que las energías renovables aporten el 20% de la energía final consumida en 2020 (en 2005 ese porcentaje era del 8%) y cumplir el objetivo de usar un 10% de biocombustibles en el transporte. Con la salvedad de que los únicos biocarburantes que se podrán tener en cuenta en el cómputo de dicho 10% serán los que garanticen un ahorro de emisiones de al menos un 35%, quedando prohibido que la materia prima para su fabricación proceda de bosques vírgenes o zonas protegidas.